La serpiente es un reptil que pertenece al orden de los Squamata o animales con escamas, al igual que las iguanas, los lagartos y los camaleones, por lo que tiene la piel cubierta de escamas, además, tiene un esqueleto que les proporciona mucha flexibilidad y una lengua bífida y está preparada para desplazarse sin necesidad de extremidades, por lo que para trasladarse se arrastra por el suelo con movimientos singulares., puede moverse cómodamente tanto por tierra como por agua.
Las serpientes son unos de los animales más fascinantes que existen. Su anatomía se caracteriza por tener un cuerpo aproximadamente cilíndrico y muy largo, cabeza aplanada, boca grande y piel pintada con uno o varios colores.
Determinadas por la ausencia de extremidades (la pitón mantiene diminutas extremidades vestigiales, herencia de su pasado evolutivo), las culebras son animales que se originaron el período Cretácico y han sobrevivido hasta el día de hoy, se registran más de 450 géneros y 3460 especies en el planeta,
La mayoría de las especies no son venenosas y las que tienen veneno lo usan principalmente para matar y someter a sus presas realizando mordeduras venenosas mediante la inoculación de veneno con los dientes cuando muerden para matar a sus presas antes de ingerirlas, como las cobras y las víboras. Algunas poseen veneno lo suficientemente potente como para causar lesiones dolorosas o la muerte a los humanos.
Otros ofidios, como las boas y pitones, matan a sus presas por constricción. Todas las serpientes son animales carnívoros.
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Tipos de serpientes
El planeta alberga más de 3000 tipos de serpientes, que se encuentran en diversos hábitats y su tamaño puede oscilar aproximadamente entre los 10 centímetros y los 10 metros. Algunas víboras tienen un cuerno en su morro y existe una serpiente de agua provista de tentáculos, pero son similares a todas las demás en lo que respecta a su morfología.
La clasificación por su taxonomía es un poco extensa y las ordenaremos en familias, especies y nombres de víboras más conocidas:
Boas y pitones (Boidae y Pythonidae)
Las familias de los bóidos y de los pitónidos se encuentran las especies más primitivas de serpientes, y como prueba de ello está que todavía conservan rudimentos de patas posteriores. No son venenosas y matan a sus presas por constricción, enrollándose a su alrededor hasta asfixiarla. Incluyen los ofidios actuales más voluminosas, como la anaconda y la pitón reticulada. Las pitones miden normalmente entre 1 y 6 metros, aunque algunas especies están entre las serpientes más largas existentes; la pitón reticulada ostenta el récord de la serpiente más larga, con 10,32 metros y la boa anaconda verde es libra por libra la serpiente más pesada con más 550 libras.
Culebras (Colubridae)
La mayoría de las serpientes vivientes pertenecen a la familia de los colúbridos, que comprende muchas especies inofensivas y de mediano tamaño como la culebra de agua europea (Natrix maura), la culebra lisa meridional (Coronella girondica) o la culebra de escalera (Rhinechis scalaris) y algunas moderadamente venenosas, con dientes opistoglifos (situados en la parte posterior de la boca), como la culebra bastarda (Malpolon monspessulanus); la culebra arborícola del Cabo (Dispholidus) es una de las pocas especies cuya mordedura puede ser mortal para el hombre.
Cobras, mambas y corales (Elapidae)
La familia de los elápidos incluye las cobras, las serpientes de coral, las mambas y las serpientes marinas todas ellas extremadamente venenosas y potencialmente mortales para el hombre; los colmillos son pequeños y están situados en la parte delantera de la boca (proteroglifos); su veneno tiene una acción principalmente neurotóxica.
Los elápidos terrestres son similares a los colúbridos; casi todos tienen cuerpos largos y finos, cabezas cubiertas por grandes escamas y no siempre diferenciadas del cuello, y ojos con pupilas redondas.
Víboras y crótalos (Viperidae)
La familia de los vipéridos comprende las víboras del viejo Mundo y los crótalos, principalmente americanos; todas son muy venenosas y con dos colmillos solenoglifos provistos de un canal que actúan como agujas hipodérmicas cuando muerden para inyectar veneno. El veneno tiene una acción principalmente hemolítica.
Los colmillos son muy largos y se pliegan contra el paladar cuando la boca está cerrada desplegándose rápidamente cuando la serpiente se dispone a atacar a la presa.
Entre sus especies destacan las víboras europeas (Vipera), los animales más venenosos del continente, las víboras cornudas africanas (Cerastes), el áspid, las víboras del Gabón (Bitis, con los colmillos más largos de todas las serpientes), las serpientes de cascabel americanas (Crotalus, Lachesis), etc.
Imágenes de serpientes u ofidios
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Serpientes venenosas
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Serpientes constrictoras
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Serpientes para dibujar
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Serpientes antiguas
La historia de la serpiente se remonta millones de años atrás. Su tamaño y peso no tienen comparación con la evolución que han sufrido hasta hoy. Los fósiles encontrados muestras serpientes gigantescas con un tamaño descomunal. También se encontró una serpiente con cuatro patas que puede ser el eslabón con las culebras modernas.
Entre los fósiles de las serpientes gigantes encontradas tenemos la Gigantophis que incluye una única especie, Gigantophis garstini, que significa “serpiente gigante de Garstin”. La segunda serpiente más grande de todos los tiempos entre las conocidas, sólo superada por Titanoboa cerrejonensis, es la serpiente más grande encontrada hasta la actualidad. Se le ha dado el nombre de Titanoboa cerrejonensis por su tamaño y por la mina de carbón del Cerrejón, una de las minas a cielo abierto más grande del mundo en Colombia.
En el año 2015 en Brasil fueron descubiertos por un equipo de investigadores los restos fosilizados de una serpiente de cuatro patas. La Tetrapodophis amplectus data de hace más de 112 millones de años y cuenta con cuatro extremidades. Aunque no es la primera vez que se encuentra un fósil de serpiente con patas, se cree que éste es el ancestro directo de las culebras modernas.
¿Qué es una serpiente?
El término serpiente procede del latín serpens, que a su vez se deriva de serpĕre, que puede traducirse como “arrastrarse”.
Las víboras son reptiles carnívoros, alargados, sin patas, del suborden Serpentes. Como todos los escamosos, las serpientes son ectotérmicas, vertebrados amniote cubiertos de escamas superpuestas.
Muchas especies de ofidios tienen cráneos con varias articulaciones más que sus ancestros lagartos, lo que les permite tragar presas mucho más grandes que sus cabezas con sus mandíbulas altamente móviles.
La serpiente u ofidio es un animal ápodo o carente de patas que se originó en el periodo Cretácico, perteneciente al orden de los reptiles, al igual que los lagartos, los cocodrilos, camaleones y las tortugas. Los reptiles tienen la piel impermeable y cubierta de escamas que se han desarrollado de acuerdo a las características de cada reptil.
Dentro del calificativo de serpientes, por lo general incluimos a culebras, víboras, crótalos, boas, cobras, mambas, cascabeles, pitones, etc. Se cree que las serpentes derivan de algún tipo de lagarto, pero los detalles concretos de su origen no están claros.
Es buena depredadora que ha perfeccionado elegantes estrategias para convertir su falta de extremidades en una ventaja. Algunas pueden capturar sus presas en el aire, inclusive en la más absoluta oscuridad, otras trepan ramas muy delgadas y así se han adaptado convirtiéndose unas de las depredadoras más eficaces y letales que existen.
Para mantenerse activos, las serpentes necesitan calentamiento externo, de tal forma que si la temperatura ambiente no es suficientemente alta, tienen que exponerse al sol durante un determinado tiempo para calentarse y, se les ve ir entre sol y sombra para mantener la temperatura corporal justa.
Características de las serpientes
Las serpientes son animales fascinantes y, por sus características que las hacen únicas como su cuerpo cilíndrico y alargado recubierto por una piel escamosa, que pueden llegar a medir aproximadamente hasta 10 metros de longitud.
Para engullir su alimento el maxilar y la mandíbula, que están sujetos al cráneo por ligamentos, se separan para acomodarse al tamaño de la presa. Así, una serpiente es capaz de tragarse una presa que sea tres veces más grande que su propia cabeza y diámetro.
Otra razón de su capacidad para tragar es la falta de huesos como el esternón para que la comida pueda pasar sin problemas por el esófago y por todo el cuerpo del reptil.
No poseen oído externo al igual que extremidades, aunque se ha comprobado que las pitones y las boas poseen extremidades muy diminutas en su parte posterior pero no participan en la locomoción, sino en las labores reproductivas.
Otra particularidad es su lengua bífida denominada así, porque termina en dos ramificaciones en forma de “Y”, usándola para captar partículas químicas y percibirlas con el órgano de Jacobson, que está en la parte delantera del paladar.
No tienen párpados, por lo que no pueden cerrar los ojos ni siquiera cuando duermen, no tienen orejas externas, de modo que no pueden oír los sonidos transmitidos por el aire. En su lugar, los huesos de la cabeza están preparados para detectar vibraciones, vitalmente importantes, por debajo de la tierra.
La cola de las serpientes representa el 20% de la longitud de su cuerpo. Sus párpados son escamas transparentes que siempre se encuentran cerrados para proteger los ojos.
Hay una gran variedad de ofidios tanto terrestres como marinas. Habitan en todas las partes del mundo, excepto en los polos, porque son heterotermos (animal de sangre fría y con temperatura corporal variable). Estos animales carnívoros mudan la piel periódicamente a medida que crece, además, se hace para reparar heridas y librarse de parásitos externos.
Esqueleto
Las serpientes son vertebrados cuyo esqueleto consiste únicamente en el cráneo, el hioides, la columna vertebral y las costillas, aunque las serpentes henófidas ( boas y pitones) retienen vestigios de la pelvis y las extremidades posteriores.
El cráneo de la serpiente es sólido y completo, al cual muchos huesos están ligeramente unidos, particularmente los huesos de la mandíbula altamente móviles, que facilitan la manipulación y la ingestión de grandes presas.
La mandíbula inferior está unida solo por un ligamento flexible en las puntas anteriores, lo que les permite separarse ampliamente, mientras que el extremo posterior de los huesos de la mandíbula inferior se articula con un hueso cuadrado, lo que permite una mayor movilidad.
La columna vertebral consta de entre 200 y 400 vértebras (o más). Las vértebras de la cola son comparativamente pocas en número (a menudo menos del 20% del total) y carecen de costillas, mientras que las vértebras del cuerpo tienen dos costillas que se articulan con ellas. Las vértebras tienen proyecciones que permiten una unión muscular fuerte que permite la locomoción sin extremidades.
En algunas serpientes, especialmente boas y pitones, hay vestigios de las extremidades posteriores en forma de un par de espolones pélvicos. Estas pequeñas protuberancias en forma de garra en cada lado de la cloaca son la parte externa del esqueleto de la extremidad posterior vestigial, que incluye los restos de un ilion y un fémur.
Las serpientes son polifodontes con dientes que se reemplazan continuamente.
Piel
La piel de una serpiente está cubierta de escamas. Contrariamente a la idea popular de que las culebras son babosas, la piel de serpiente tiene una textura suave y seca.
La mayoría de las víboras usan escamas del vientre para desplazarse. Las escamas del cuerpo pueden ser lisas, quilladas o granulares.
Los párpados de una serpiente son escamas transparentes de “espectáculo”, que permanecen permanentemente cerradas, también conocidas como brille.
El desprendimiento de escamas se denomina ecdysis (o en uso normal, muda o desprendimiento ). Las escamas de serpiente son extensiones de la epidermis; por lo tanto, no se desprenden por separado sino como una capa externa completa durante cada muda, similar a un calcetín que se da vuelta al revés.
Los ofidios tienen una gran diversidad de patrones de coloración de la piel. Estos patrones a menudo están relacionados con el comportamiento, como la tendencia a tener que huir de los depredadores.
La forma y el número de escamas en la cabeza, la espalda y el vientre son a menudo característicos y se utilizan con fines taxonómicos. Las escalas se nombran principalmente de acuerdo a sus posiciones en el cuerpo.
Muda
La muda, o ecdysis, cumple una serie de funciones. En primer lugar, se reemplaza la piel vieja y desgastada; En segundo lugar, ayuda a deshacerse de parásitos como los ácaros y las garrapatas.
Se supone que la renovación de la piel mediante la muda permite el crecimiento en algunos animales, como los insectos; Sin embargo, esto se ha disputado en el caso de las serpientes.
La muda ocurre periódicamente a lo largo de la vida de la serpiente. Antes de una muda, la serpiente deja de comer y, a menudo, se esconde o se mueve a un lugar seguro. Justo antes de desprenderse, la piel se vuelve opaca y seca y los ojos se vuelven turbios o de color azul.
La superficie interna de la piel vieja se licua. Esto hace que la vieja piel se separe de la nueva piel debajo de ella. Después de unos días, los ojos se aclaran y la serpiente “se arrastra” fuera de su vieja piel.
La piel vieja se rompe cerca de la boca y la serpiente se retuerce, ayudada por el roce contra superficies ásperas. En muchos casos, la piel se despega hacia atrás sobre el cuerpo de la cabeza a la cola en una sola pieza, como tirar de un calcetín de adentro hacia afuera. Una nueva capa de piel más grande y brillante se ha formado debajo.
Una serpiente más vieja puede arrojar su piel solo una o dos veces al año. Pero una serpiente más joven, aún en crecimiento, puede arrojar hasta cuatro veces al año.
Veneno
Las cobras, víboras y especies estrechamente relacionadas utilizan el veneno para inmovilizar o matar a sus presas. El veneno de la serpiente es saliva modificada, entregada a través de colmillos.
Los colmillos de serpientes venenosas como viperidae y elapidae son huecos para inyectar veneno con mayor eficacia, mientras que los colmillos de serpientes con colmillos traseros como el boomslang simplemente tienen una ranura en el borde posterior para canalizar el veneno hacia herida.
Los venenos de las víboras a menudo son específicos de sus presas; su papel en la defensa personal es secundario.
El veneno, como todas las secreciones salivales, es un predigestante que inicia la descomposición de los alimentos en compuestos solubles, facilitando la digestión adecuada. Incluso las mordeduras de serpientes no venenosas (como cualquier mordedura de animal) causarán daños en los tejidos.
Ciertas aves, mamíferos y otras culebras (como las serpientes de rey ) que se alimentan de serpientes venenosas han desarrollado resistencia e incluso inmunidad a ciertos venenos.
Las serpientes venenosas incluyen tres familias de serpientes, y no constituyen un grupo de clasificación formal utilizado en taxonomía.
Los venenos de serpientes son mezclas complejas de proteínas y se almacenan en las glándulas venenosas en la parte posterior de la cabeza. En todas las serpientes venenosas, estas glándulas se abren a través de los conductos hacia los dientes ranurados o huecos en la mandíbula superior.
Estas proteínas pueden ser potencialmente una mezcla de neurotoxinas (que atacan el sistema nervioso), hemotoxinas (que atacan el sistema circulatorio), citotoxinas, bungarotoxinas y muchas otras toxinas que afectan al cuerpo de diferentes maneras. Casi todo el veneno de serpiente contiene hialuronidasa, una enzima que asegura una rápida difusión del veneno.
Hábitat natural de los ofidios
Aquí te mostramos algunos de los lugares donde viven las serpientes de forma autóctona o nativa
Las serpientes vivas se encuentran en todos los continentes excepto en la Antártida y en la mayoría de las masas terrestres más pequeñas; las excepciones incluyen algunas islas grandes, como Irlanda, Islandia, Groenlandia, el archipiélago hawaiano y las islas de Nueva Zelanda, y muchas islas pequeñas de los océanos Atlántico y Pacífico central. Además, las culebras marinas están muy extendidas en los océanos Índico y Pacífico.
Su tamaño varía desde la pequeña serpiente de hilo de Barbados de 10,4 cm (4,1 pulgadas) hasta el pitón reticulado de 6,95 metros (22,8 pies) de longitud. La especie fósil Titanoboa cerrejonensis tenía 12.8 metros (42 pies) de largo.
Se pueden encontrar serpientes en todos los continentes, excepto en la Antártida y tan alto como 4,900 metros en las montañas del Himalaya de Asia. Existen numerosas islas en las que no hay serpientes, como Irlanda, Islandia y Nueva Zelanda (aunque las aguas de Nueva Zelanda son poco visitadas por la serpiente marina de vientre amarillo y la krait de mar ).
Respecto a su hábitat, las serpientes no acostumbran a desplazarse grandes distancias, por lo que son usuales en regiones selváticas y zonas tropicales de temperaturas constantes. Además, también pueden habitar en desiertos y sabanas, bajo la tierra, en el agua, y hasta en los árboles.
Del mismo modo, en función de donde viven las serpientes su comportamiento puede varias. Los trópicos son tan calurosos que los reptiles pueden estar activos durante mucho tiempo y las zonas más frías les fuerza a permanecer aletargados y tienen que hibernar.
¿Qué comen las serpientes?
La alimentación de las serpientes es directamente proporcional a su tamaño, debido a que tragan su alimento. Lo que significa que las pequeñas engullen presas de menor tamaño como pequeños roedores, mientras que las de mayor tamaño ingieren animales como lagartos, ciervos, monos, etc. De hecho, los ofidios pueden consumir animales que superan su tamaño
Las serpientes no son vegetarianas, todas las serpientes son carnívoras, por lo que su dieta se compone de mamíferos, aves, insectos, peces, anfibios, e incluso ejemplares de su misma especie. Dependiendo del lugar en donde viven las serpientes, tendrán una u otra dieta.
Parecería que estos ofidios están en desventaja con respecto a los depredadores capaces de correr, desgarrar y saltar, sin embargo, su morfología les otorga ciertas capacidades que contrarrestan su desventaja de carecer de extremidades con el desarrollo de técnicas propias de captura y deglución muy eficaces.
Después de ingerir su presa, una serpiente debe aletargar para cumplir el proceso de la digestión. Esto se debe a que el proceso digestivo requiere de mucha energía que la serpiente debe usar para digerir con eficiencia la comida, la cual puede durar por días o meses, según el tamaño de la presa. Además, debido al largo proceso de digestión, estos animales pueden pasar meses sin alimentarse. Algunas especies utilizan su veneno para quebrar los tejidos de sus presas y otras emplean la estrangulación como técnica de caza, estas son las serpientes constrictoras.
En la selección de sus presas influyen varios factores como el hábitat, por ejemplo “las serpientes acuáticas suelen alimentarse de peces”, la temperatura corporal, el movimiento de la presa o su olor. Aunque existen especies con una dieta más especializada, por lo general, se alimentan de cualquier animal vivo y en cautividad pueden consumir animales ya muertos pero frescos y descongelados.
¿Cómo se reproducen las serpientes?
En la reproducción de la serpiente intervienen los órganos genitales de ambos sexos. Los reptiles exceptuando las tortugas, los cocodrilos y las tuátaras el órgano reproductor es pareado, es decir, que el macho posee dos órganos reproductores, cada uno llamado hemipene y las hembras tiene dos hemiclítoris, uno a cada lado del orificio cloacal
En época de apareamiento las hembras secretan una sustancia química llamada feromona a través de glándulas situadas en su piel y van dejando un rastro al desplazarse para que los machos sexualmente adultos se han atraídos por el efecto de esta sustancia, dando inicio al cortejo. Durante el cortejo, que en ocasiones ocurre grupo, machos y hembras se olfatean, saborean, miran y tocan cada parte de sus cuerpos y, en un momento determinado finalmente se produce el apareamiento. Tras el apareamiento, el macho y la hembra se separan y no mantiene una relación posterior.
Todas las serpientes utilizan fertilización interna mediante cópula. La mayor parte de las serpientes son ovíparas que tras la fertilización se desarrollan huevos que la hembra deposita en lugares seguros como madrigueras y nidos. La mayoría de especies abandonan los huevos poco tiempo después de la puesta; otras, como las pitones, permanecen cerca e incluso cubren los huevos enrollándose en ellos para mantenerlos calientes y apretando suavemente su cuerpo para romper el huevo, como la pitón.
También encontramos serpientes ovovivíparas que son ofidios que no depositan los huevos en el ambiente sino que los mantienen en su cuerpo hasta que la cría rompe el cascaron y abandona el cuerpo de la madre, como las víboras.
Además, existen especies que son totalmente vivíparas, que desarrollan embriones completos en su interior por lo que están provistas de placenta que protegen a la cría hasta el nacimiento, como la boa constrictor.
Generalmente, el período de incubación tomará entre dos y cinco meses. Tras la eclosión, la madre abandonará el nido, y las nuevas crías deberán cuidarse por sí mismas a partir de ese momento.
¿Cómo se desplazan las serpientes?
Al no tener extremidades la anatomía de la serpiente está especialmente adaptada para poder desplazarse. Poseen gran agilidad y deben valerse de sus poderosas escamas ventrales para desplazarse, brindándole a la serpiente una superficie de agarre y una fuente de impulso favoreciendo el movimiento.
Por medio de pequeñas ondulaciones que efectúa con su cuerpo, las víboras logran así desplazarse a gran velocidad y en algunas ocasiones con sus poderosas escamas ventrales puede moverse en línea recta. Las serpientes son capaces de nadar, bucear, escalar, saltar, cavar e incluso algunas especies pueden planear.
Presenta diferentes tipos de locomoción terrestre, la forma más común se realiza mediante ondulaciones laterales del cuerpo, que comienzan en la cabeza hasta terminar en la cola.
Otra forma de desplazamiento supone el uso de una parte del cuerpo como ancla estática para impulsar el resto del cuerpo. También usando sus músculos y escamas ventrales algunas culebras se pueden desplazar de manera rectilínea.
Algunas especies, se desplazan levantando la cabeza y moviendo la parte anterior del cuerpo hacia delante, para después levantar la zona media del cuerpo y moverla, este movimiento lo realizan sobre todo de ecosistemas desérticos, como la cascabel cornuda (Crotalus cerastes), Las escamas ventrales ensanchadas de muchas serpientes impiden el deslizamiento en dirección contraria a la marcha.
Serpientes como Mascotas
Algunas especies de ofidios (especialmente especies dóciles como la pitón bola y la serpiente del maíz) se mantienen como mascotas. Para satisfacer esta demanda se ha desarrollado una industria de cría en cautividad.
Las criaturas en cautiverio se convierten en mejores mascotas y se prefieren en lugar de los ejemplares capturados en el medio silvestre. Las serpientes domesticas pueden ser mascotas de muy bajo mantenimiento, especialmente en comparación con las especies más tradicionales. Requieren un espacio mínimo, ya que las especies más comunes no superan los 5 pies (1,5 m) de longitud. Las mascotas se pueden alimentar con poca frecuencia, generalmente una vez cada 5 a 14 días. Ciertas culebras tienen una vida útil de más de 40 años si se tiene el cuidado adecuado.
Depredadores de las serpientes
Aunque sea poco creíble la serpiente cuenta con un gran número de depredadores en la naturaleza, algunos de estos son:
El erizo
La naturaleza lo doto con una coraza de espinas, la cual usa para contrarrestar los ataques de víboras. Con cada ataque que la serpiente hace en contra del erizo, termina lastimada y totalmente debilitada por las heridas ocasionadas por las espinas, así termina el erizo devorándola lentamente, Además, los erizos son parcialmente inmunes al veneno de la serpiente.
El tejón de la miel
Son hábiles a la hora de cazar serpientes, a las que agarran detrás de la cabeza en sus poderosas mandíbulas y matan rápidamente. Es inmune al veneno de la cobra, puede matar víboras venenosas extremadamente peligrosas, como la víbora, y si es mordido se paraliza por horas, pero no antes de matarla e iniciar a comérsela, al despertar sigue alimentándose con el reptil.
La mangosta
Atormenta a la serpiente con la mirada, la inmoviliza para luego devorarla. Se sumergen en una lucha relámpago de saltos y mordeduras para ambas partes. El notable grosor de la capa de la mangosta dificulta la introducción del veneno de la serpiente, pero no son totalmente inmunes a las toxinas del ofidio.
El pájaro secretario
Su alimento favorito son las serpientes que matan con fuertes y precisas patadas. Si no la puede matar en el suelo, la levanta en el aire y la lanza sobre piedras. El gran copete de plumas en la nuca se extiende durante los ataques y engaña a las serpientes.
La serpiente
La mejor presa de una serpiente es otra serpiente, pues su forma facilita que sean devoradas por otra especie similar. Existen algunas serpientes que se especializan en alimentarse de otras, como las Musurana, de América del Sur, o la cobra real.
Las águilas
Estas aves rapaces se especializan en el consumo de culebras, de ahí su nombre. Estas águilas pueden encontrarse en Europa, Asia y África.
Religión
Las serpientes son parte de la adoración hindú. Todos los años se celebra un festival,Nag Panchami , en el que los participantes adoran imágenes o cobras en vivo.
Serpientes notables en el hinduismo son Ananta, Vasuki, Taxak, Karkotaka y Pingala. El terminonāga Se utiliza para referirse a entidades que toman la forma de grandes serpientes en el hinduismo y el budismo.
Las serpientes también han sido ampliamente veneradas, como en la antigua Grecia, donde la serpiente era vista como un sanador. Asclepio enrollo alrededor de su varita, un símbolo visto hoy en muchas ambulancias.
En términos religiosos, la serpiente y el jaguar son posiblemente los animales más importantes de la antigua Mesoamérica. “En estados de éxtasis, los señores bailan una danza de la serpiente; grandes ofidios adornan y sostienen edificios desde Chichen Itzá hasta Tenochtitlan (templo de la serpiente emplumada) y la palabra náhuatl Coatl significa serpiente o gemelo, forma parte de deidades primarias como Mixcoatl, Quetzalcoatl y Coatlicue”. En los calendarios mayas y aztecas el quinto día de la semana se conoció como el día de las serpientes.
En el judaísmo La serpiente de bronce es también un símbolo de curación, y la vida inminente.
Los manejadores de culebras usan a las serpientes como parte integral del culto de la iglesia para mostrar su fe en la protección divina. Sin embargo, más que nada en el cristianismo, la serpiente ha sido vista como un representante de la malvada y astuta conspiración.
San Patricio tiene la reputación de haber expulsado a todas las víboras de Irlanda al convertir el país al cristianismo en el siglo V, lo que explica la ausencia de serpientes allí.
Medicina
Se están investigando varios compuestos de venenos de serpientes como posibles tratamientos preventivos para el dolor, cánceres, artritis, derrames cerebrales, enfermedades cardíacas, hemofilia e hipertensión, y para controlar el sangrado (por ejemplo, durante la cirugía).
Documental sobre las serpentes
Este corto video de forma entretenida habla de la serpiente
Fuentes:
Serpientes – Wikipedia
Snake | Classification, Facts, & Types
Ofidismo por Dra. Evelyn Van Brussel
Snakes – Reptiles Magazine
